Bio

Bio llegó al refugio con muchos problemas de salud. Ahí lo cuidaron y trataron, y Bio se puso mejor, aunque le quedaron ciertos vestigios de su vida en la calle: era sordo y tenía problemas cerebrales. Movía la cabeza de aquí para allá, y se chocaba contra las cosas! Así que nos lo trajimos de acogida, para que pudiera tener más libertad de movimientos y fuera controlándose mejor. Lo difundimos, le buscamos casa.... y al final la encontró: la nuestra. Ya no pudimos separarnos de él. Está cambiadísimo, y ya se maneja como un gato normal. Salta, trepa, y caza (o lo intenta) como ningún otro. Sigue sin oír nada, lo cual lo hace muy simpático. ¡Todo el mundo mueve la mano para llamarlo! ¿Os lo podéis imaginar? Pues así es. Es como un perro, va detrás nuestra por casa, y nos saluda cada vez que nos ve con un característico maullido. Es estupendo. Conquista a todos los que lo ven <3